jueves, 14 de mayo de 2015

Camila Corral

La llave soñada


El lunes la alarma suena a las 8, Anastasia la apaga, abre los ojos y se dirige hacia su escritorio, sobre el cual esta su uniforme perfectamente doblado y planchado. Una camisa blanca, un sweater azul, una pollera gris a cuadros, medias largas y en el piso, un par de zapatos negros de cuero. Levanta la cabeza y mira por la ventana, es un día algo nublado como cualquier otro. Se viste, agarra su mochila, baja a la cocina a tomar su café y parte camino a la escuela. Cuando regresa toma el té con sus padres y hace sus deberes. Luego cena y se va a dormir.
A la mañana siguiente la alarma suena a las 8, Anastasia la apaga, abre los ojos , mira por la ventana, se viste, baja a tomar un café , va a la escuela, vuelve, toma  el té, hace los deberes, cena y se va dormir...
Al día siguiente la historia se repite, los hechos se van desencadenando uno a uno... Todos los dias iguales, día tras día... y se vuelve a repetir.
Anastasia Flint tiene 15 años, vive en una casa antigua de la calle King en Bristol, Inglaterra. El Señor Flint es contador, y la Señora, neurocirujana.
El lunes siguiente, luego de su aburrido día rutinario, cuando Anastasia se fue a dormir,  algo sucedió, esa noche, soñó....
La mañana siguiente, cuando miró por la ventana, vio un pájaro en la cornisa, la miró unos segundos y salió volando, desapareciendo entre los altos edificios de la ciudad. Anastasia esbozó una pequeña sonrisa.
Estuvo todo el día siguiente tratando de recordar qué fue lo que había soñado, sin poder lograrlo.
Espero ansiosa el momento en volver a dormir. Deseaba soñar otra vez...
Y volvió a abrir la puerta de los sueños... Soñó que volaba sobre aquel pájaro que apareció en su ventana, pero era enorme, casi del tamaño de un helicóptero. Ella iba recostada boca abajo sobre su lomo, abrazándolo fuerte con brazos y piernas, mirando desde lo alto hacia abajo.
Y la noche siguiente se apuro a acostarse y subió nuevamente a su hermoso pájaro y volaron... No iban hacia un destino en especial, solo volaban sobre una ciudad, que no era Bristol. En la ciudad no había autos, ni edificios, ni personas yendo y viniendo a toda velocidad de las oficinas; ésta estaba llena de plazas con niños jugando, de animales, de gente paseando, de libertad.
así, noche tras noche, Anastasia abrió las puertas de nuevos mundos, de nuevos seres, de nuevos sentimientos.
Descubrió que podía alegrarse, emocionarse, disfrutar, llorar, reír... Que podía conocer cosas distintas, vivir aventuras maravillosas, abrir nuevas puertas...
Ese miércoles Anastasia se despertó a las 8, se levantó de la cama y se dirigió a la ventana. Estaba lloviendo. Contempló las gotas que caían lentamente del otro lado del vidrio, abrió la ventana y se asomó. Anastasia sintió el frío, el viento, el agua empapando con su rostro. Cerró la ventana y se secó la cara con el sweater que estaba sobre el escritorio.
Sonrió. Su corazón latió con fuerza y sintió mariposas en la panza. De pronto su vida se iluminó... Y se dio cuenta que tal vez, solo tal vez todos esos sentimientos que nacieron en sus sueños eran suyos, muy suyos; y que si quería, si se decidía, no solo podían ser sueños, sino que podían formar parte de su realidad de todos los días. Y sacar todo lo que tenía dentro de aquella jaula, en la que, antes de empezar a soñar, no sabía que lo estaba.
Tal vez, solo tal vez...si se decidía, podía abrir sus alas y volar...


6 comentarios:

  1. Camila: con una idea sencilla, construis un personaje interesante y conmovedor. Creo que, si tenés ganas de dedicarle un poco más de tiempo y trabajo a la escritura, se podría enriquecer con una variedad de sueños (soñar sin controlar lo que se sueña ni lograr soñar lo mismo cada noche); piezas que vayan armando el espacio y el momento para actuar el deseo de libertad. Además, no explicitar la idea de la jaula, sino construirla con algunos elementos que se sumen a la rutina de Anastasia, ya que no se entiende su encierro o la imposibilidad de salir porque no hay nada que le impida hacerlo.
    Repensar el uso estético del lenguaje. ¿Qué recursos podrían enriquecer el relato y provocar la sensibilidad de los lectores?
    Rever el uso de puntuación y preposiciones.
    Falta un título.
    ¡Buen trabajo!
    Nota: 7

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  2. Me pareció interesante la idea de que la chica a partir de un sueño se da cuenta que la vida puede ser mucho más que una simple rutina aburrida pero me gustaría saber que hecho desencadenó ese sueño, ese cambio, ya que había pasado 15 años viviendo de esa forma.
    Agustina Yapor

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  3. El título lo había puesto pero no se veía. Ya lo corregí, gracias.

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  4. Cami, me gustó mucho el cuento. Es bastante simple pero tierno . Se me hizo muy fácil imaginarme visualmente lo que escribiste, ver lo que estabas contando.
    Milena Bonifacini

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  5. Me gustó la historia en general, pero el final me parece muy bueno. Me pareció que no era muy difícil de leer. Me gustó mucho.

    Tomás Barbajelata

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  6. Me gustó la historia en general, pero el final me parece muy bueno. Me pareció que no era muy difícil de leer. Me gustó mucho.

    Tomás Barbajelata

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