sábado, 5 de noviembre de 2016

Estelar- Lucía Estevez

ESTELAR

Prólogo

¿Qué es la poesía?

Frutillas con crema y banana con dulce de leche
Narcisismo
Mirar al cielo
Tus labios después de tomar café
Olor a rosas y jazmines
La palabra carrusel
La muerte

EL NIÑO
I

¿Quién le escribe poemas a las estrellas?
¿Cómo atreverse a hablar del más allá con los pies atados a la tierra?
¿Qué saben los cerdos de las estrellas si nunca han mirado al cielo?
¿Cuándo fue la última vez que te molestaste con estirar el cuello para mirar al firmamento?
¿Dónde irías si recayera en vos la ira de las estrellas porque tus poemas no les hacen justicia?
¿Por qué escribirle poemas a las estrellas?

II

¡Salgo de viaje!
Me voy a las estrellas
No me crean
Ni me extrañen
Yo me voy a volar alto

A una fiesta
De un salto
No habrá más penas
Por un rato

III

Ingenuo polizón espacial
¿Usted cree que sabe de astronomía?
Lo que conoce son puras mentiras
Sólo utopías de cristal

La luna es el sol con vestido de noche
Las nubes se pesan en elefantes
Los niños pintan el cielo con sus colores
No saber todo esto debería avergonzarle

En Venus llueve dulce de leche
Caen los chubascos como firuletes
El piso de Marte tiene gusto a naranja y miel
Pues eso el lo que le da color a su piel

Y bueno, en Júpiter vuelan las vacas
Tapate la cabeza por si hacen caca


IV


Hola abuelo
Hoy te voy a visitar
Con mi Barquito amigo
Voy a juegar

Mamá me dijo que te fuiste allá arriba
A ir a pasear
Con la abuela y con la tía

Y hoy te voy a buscar
Para poder otra vez juntos
Juegar y merendar

V

¿Dónde estás Barquito?
Que ya no te veo más
¿Por qué te alejaste de este niño?
Que sólo quería juegar

Ay Barquito qué será de mi
¿Cuándo volverás a estar aquí?

Ay Barquito volvé pronto
Que cuando no estás acá
Tengo que juegar con otros tontos

Bueno, y si te vas
Yo ya no juego más

EL HOMBRE

VI

Vamos pibe, vení a laburar
Que qué vamos a hacer
A pescar estrellas

Dale subite,
Prestá atención

Acá hilito de diamante
Cañita de marfil
Anzuelo de plata

Sí, hay muchas, parece fácil
Pero no es así
Prestá atención

¿De carnada?
Rayos de luces violáceas
Por qué qué
Que se yo, les gusta

¡Cuidado pibe!
Pedazo de hijueputa
Ya vas a ver…

VII

Cuando era chiquito
Las miraba con recelo
Jugaba con mi Barquito
Mientras ellas iluminaban el cielo

Ahora soy hombre grande
Y las miro sin descanso
Cumpliendo con lo que el patrón mande
Volviéndome cada día más manso

VIII

Ya no sé
Cuántos días
Cuántas noches
Pasaron desde que llegué

Ya me quiero ir
La espalda encorvada
Las piernas cojas
Ya quiero partir

Ya no sé
Pues me olvidé de contar
Cuántos dedos me cortaron
Y cuántos me han de quedar

IX


Me invitaron a tomar té en la morada del patrón
Té de miedo y jazmín
Masitas con veneno y ralladura de limón

Me quieren callar
Callándome el hambre
Piensan que pueden
Con esto comprarme

Me creen una rata inmunda,
Un mal viviente
Pero no saben que soy yo
Quien hace que sean pudientes

X

Hoy se arma la podrida
Hoy les cae la noche
A la gilada de la oligarquía
Después que no nos reprochen

Esta noche no hay tu tía
Con los que viven de la plusvalía
Si es el obrero el que transpira
¿Por qué a ellos les llueve todo de arriba?

EL MUERTO

XI

Que callen esas campanas
Que velan a los caídos
Si ellos se lo buscaron
Por hacerse los subversivos

Que callen esas campanas
Que no velan a nadie
Sólo a un par de hijos
Hijos de su madre

Que callen esas campanas
Que me van a hacer enojar
Y si me hacen enojar
Otra vez van a cobrar

XII

Caminá para atrás
Meté los dedos en el enchufe
Bailá con los pantalones en las rodillas
Vení que te vamos a herrar
Es sólo para que te sientas bienvenido
Escupí para arriba
Que te caiga en los ojos
Dormí con un ojo abierto
O tal vez con los dos

XIII

Si esto es morir
Entonces vení conmigo
Dejá atrás tus dudas
Te aseguro, es divertido

Si esto es morir
Por qué no me das la mano
Entrelazá tus dedos con los míos
Y saltemos con los ojos cerrados

Si esto es morir
Apuntemos al cielo
Si caemos no importa
Caeremos en nubes de bizcochuelo

XIV

Mis disculpas
Lamento haberte arrastrado a esta aventura
Que no era tuya

Pero ya se termina
Esta historia
Y mi vida

Ahora ya me voy,
Al cielo, al infierno
Con Dios, con el Diablo
A convertirme en polvo

XV

Ahora me voy
Adiós me voy
El menudo hombre gris
Se aplicó a beber su leche con miel
Ya fría
Plática de borrachos
Las mismas de mi niñez
Dos hombres se dieron la mano
Adiós mi buen amigo y perdóname
Éramos jóvenes y despreocupados
Me duele el pecho de sólo recordarlo
Perdóname que no haya estado nunca
Ahora me voy
Purgada nuestra conciencia
Me adentre a un cielo casi negro lleno de estrellas
Y me hundí en el sueño



1 comentario:

  1. Lucía: ¿se puede ver las estrellas y que no duela? Sí, saltar de una a otra o navegarlas en barquito de palabras y llegar al cielo o al infierno con sabor a dulce de leche en el paladar y los ojos cerrados para leer mientras pasa volando una vaca. Así vas, con los dedos en el enchufe, y nos llevás a una lectura que sorprende, conmueve, da risa o ternura.
    Hacés un trabajo inteligente, personal y sensible. Algunos poemas están más logrados que otros, sobre todo con algunas rimas, y un cambio un tanto brusco entre la estética de aquellos que giran en torno del niño y los que reúnen al hombre.
    Disfruté mucho tu libro y acá queda para volver de vez en cuando a pasear por estas estrellas con vos. Gracias por el compromiso, siempre.
    NOTA: 9

    ResponderEliminar