Microrrelatos- Lucía Estevez

Amor Zafiro

Ahora basta. ¿Color deseo? Estupideces ¿Fue grato habernos ido juntos kilómetros? Las manos no pueden olvidar, quisiera recordar sin tristeza. Una vencida Waterloo, Xativa, yo zafé.

Desdichado 146

Cuanto amor siento en el alma por la mujer que me hace feliz. Ella deja su remera en el piso. Cosquillas, caricias y susurros. Cuanto gozo transmite tu cuerpo. Ya estas burlándote de mí, del otro y de cuántos más. Miro por la ventana. El cana le hace señas. Las piernas van a tres mil quinientos. El mundo sin sueño que dejas, monotemático. Sarmiento esquina Larrea. Nunca vi el colectivo. Ya no estas, no vuelves a mi.

La guerra es un juego

El peón mira a sus gobernantes a los ojos y consternado les comunica que se acercan hombres y caballos del reino enemigo. Ocho y dos dejan la vida por sus monarcas. Les derrumban paredes y torres del castillo. Parece que no saben jugar. La reina, siente que es la única que puede acabar con esto, se escapa, y uno por uno masacra sin piedad a sus enemigos. Pero es inútil, su rey está acorralado.

Que grande sos

Salió del quirófano, como nuevo, el Gral. Juan Domingo Perita.

¿Un beso francés?

Un hombre que combate con su mujer por conseguir una buena parte de la cama. Josefina, durante tantos meses de aburrimiento en los que estuvieron separados, indulgió en  bombones belgas y dulces alemanes.

Calle Morgue

Si un monito puede asesinar, y hacer que el  detective  se  rompa la cabeza tratando de descubrir quién es, entonces yo también puedo, total, con los tiempos que se toma la justicia.

Boquitas pintadas

Boquitas que pasaron dando besos por todos lados,  pasaron por todos los labios menos por los mios. Un tanguito de Le Pera para consolarme.