LLUVIA
1
Los días de lluvia la ciudad parece estar vacía
Los pocos están apurados, ni tan siquiera se miran
Seguro tienen miedo de sentirse
o de perder el tiempo
AJEDRESÁICAR 2
Piso la vereda mojada, nacen los truenos
A mi lado veo cuatro caballos negros
Sumergiéndose con las patas bien en alto
Derritiéndose en la espesa brea
Un hombre mira
pasa y los bordea
Yo caigo y el magma me transpira
Vuelo y creo flotar hasta que,
en la esquina, me
libero.
El ver los cuatro lados me organiza
Y da fuerzas para la próxima cuadra
VOCES
3
Me gusta pasar y ver adentro.
Pasar y ver durante luz encendida
Luz que contrasta con la noche, que va cayendo
El adentro es silencioso, como tierra quieta
Pero hay veces que se escuchan relámpagos
Y otras que se escuchan silabas difusas
Esas son voces que parecen ser imagen,
Perdida entre cien días
ELLAS 4
Y a enterrado en el abrecartas
A las esquinas las siento igual a todas
V uelo y barajo un par de cuadras
O igo putas y viajeros escupiendo historias pardas
L os escucho hablar otras lenguas
E llas seguro no vuelan como yo, allá ellas
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5
Entrecerre los ojos y preferí perderla
Lejos entre robles y láminas de seda
Verde bajo el suelo me despierta
El caer de una moneda
VOS 6
Vos tenes maneras distintas de ver las cosas
Buscas ver los ojos de esos mares
Esos que lloran viento
y escupen rocas.
Todos estaríamos mejor, ojala lo logres
TÚ
7
En la ciudad prendida fuego
Tú eres quien va por aguas
Con tu barco ciego
Y tu cáliz de bronce, mapeando cuadras
HIPERBOLOIDE
8
Columnas de vapor, sobre el hiperboloide
se parten y avanzan,
flotan
Hebras de metal, anfibias
Despiertan y brillan
Buscan la luz y las montañas
En la lejanía, destellos y relámpagos…
Explosion multitransparente
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9
Sombras se quiebran en el vértice
Y ahí está, el crepúsculo:
La raja entre los mundos
VOLVER
10
Relojes quietos acompañan
esos retratos congelados
Que avivan leves recuerdos anublinados
Tan difusos como el agua turbia acumulada en las canillas
Llenas de oxido poroso y descascarante
Como el yeso que salpica las baldosas
VOLVER II 11
La tierra se levanta y vuelve a caer
Para empezar de cero
El yeso agrietado y las baldosas frias
Contienen tantos pasos, tantas marcas de
Risas ahogadas y chasquidos de jazz
Que se raja y agrieta, formando ríos
CIGARRA 12
Cascarillas en los arboles gigantes
armaduras muertas que insisten en trepar hasta la cima
aferradas quien sabe como a la superficie, soportando
mudas y congeladas
lejos están de los niños en
bicicleta y las esquinas arboladas
HAMBRE 13
Paredes arboladas, tapadas con pesadas hiedras
Polvo micropartiendo luces
Hasta desaparecer en las sombras,
Formando finas cruces
Algo que se arrastra, respira y mueve el polvo
Lo junta en las aristas
Ella no va a ningún lado, se retuerce y se hace bolo
El banquete comienza, egoísta
EL MALDITO UROBOROS
GRANO 14
Sombras me empujan y me atan
Planean los rastreros sobre mi
Y digo basta
La arena corta mis pies,
Los tapa, se lo traga
Y digo basta
Caigo en el ardiente polvo
Y el suelo cae y pasa por el fino tubo
Caer y caer hasta sofocarme
Por el margen
o
15
Luz de las ventanas y polvo en el espacio, gran cuadrado
En el suelo, las pintas luminosas delatan pequeño botón
negro
Está encerrado y no puede hacer nada
Atardece y el botón ahora esta cubierto de sombras,
invisible
Ya es libre y corre sin correa por las tablas de madera
Evitando, claro, los cilindricos de luz
Juan: Escribir resulta siempre una provocación, una oportunidad para dar cuenta de una habilidad en la que se juegan saberes, sensibilidad, miradas del mundo; lo anterior y lo futuro. Es ir andando los sentidos de las palabras y de la vida; poner el cuerpo en la letra o irse en un amague. A mitad de camino se queda tu elaboración, que se mueve entre lo que parece muy pensado y cuidado y cierta inestabilidad en el uso del vocabulario y en el plano sonoro. Ojalá tengas ganas de seguir jugando con estos poemas. Mientras lo hagas, si lo hacés, podrías hacerlo en compañía de Piazzolla o música similar, ya que hay ecos tangueros escondidos en los versos.
ResponderEliminarFaltan el prólogo y la imagen.
Gracias por tu sensibilidad curiosa, tu inteligencia afable, tu sonrisa, siempre.
NOTA: 7+